El cuarto de una serie de relatos sobre Olive Kitteridge, que, como ex profesora jubilada a punto de cumplir 70 años, describe el proceso de envejecer, el proceso de enamorarse y el proceso de aceptar los drásticos cambios en su vida. La historia es realmente apasionante, tanto que la protagonista resulta cada vez más familiar al lector después de las partes anteriores.
De hecho, el nivel menos evidente de la historia son las emociones humanas como la frustración, la ira, el enamoramiento, la incomprensión. La autora consigue ilustrar estas emociones con situaciones muy realistas y familiares de la vida cotidiana. Es una historia extraordinaria sobre gente corriente y sus vidas que en realidad no difieren mucho de las nuestras.